La Asociación Nacional de Distribuidores de Publicaciones (ANDP) presentó en Casa del Lector el Estudio sobre la situación de las publicaciones periódicas en España. Esta investigación ha sido liderada por el profesor Valentín Alejandro Martínez Fernández (Universidad de Coruña), en colaboración con Francisco Campos Freire (Universidad de Santiago de Compostela) y Óscar Juanatey Boga (UDC), junto con equipos de ambas universidades.
Valentín Martínez da una gran importancia al cambio de un modelo de negocio obsoleto hacia otro que entienda al nuevo consumidor que quiere acceso al contenido de información y del entretenimiento total e inmediato.
Una de las primeras conclusiones que el Prof. Martínez ha resaltado que en la sociedad actual “hay vida para las publicaciones periódicas editadas en papel.” Si bien su mercado, principalmente el de los diarios y revistas, será mucho más reducido, del mismo modo que sus públicos, sus audiencias, igualmente serán sensiblemente menores y muy segmentadas.
En las conclusiones del estudio, que puede descargarse libremente desde Renodo (sección de Recursos), se señala que es necesario “afrontar decididamente un proceso de transformación que, por otra parte, parece abocado a sustentarse en una clara hibridación de los productos informativos y de entretenimiento editados en papel con aquellos dirigidos y canalizados a través del ámbito digital”.
Hay en el desarrollo del estudio una clara descripción de un inminente cambio en las bases de sostenibilidad del negocio editorial de las cabeceras convencionales, pasando de sostener las ediciones en papel a las digitales, a un futuro no muy lejano en que estas últimas serán las que mantengan a las primeras, con un esquema de complementariedad en cual lo impreso desempeñaría el papel de generador de valor añadido.
En el análisis del Prof. Martínez se pone de manifiesto la difícil posición en la que el propio sector se ha situado al haber estimado a las tecnologías como una herramienta para hacer llegar directamente el producto al consumidor y sin ningún tipo de intermediación. Es cierto que esto implicaba un importante ahorro de los gastos de distribución y una posible mucho mayor difusión, con el colofón de un potencial incremento de los ingresos publicitarios. Con este esquema los editores facilitaban exactamente el mismo producto que los compradores en quiosco pagaban, pero con la particularidad de que en formato digital se regala.
Uno de los efectos que ha tenido el esquema de la “cultura de la gratuidad” ha sido la
la progresiva reducción de la red de distribución, fundamentalmente en lo referido al cierre de puntos de venta.
En el apartado de propuestas el estudio defiende la necesidad de vencer las desconfianzas y empezar a cooperar en la cadena para aprovechar las oportunidades que ofrece la transformación del modelo de negocio y consecuentemente la de la cadena de valor.
En este estudio se señala: “Se ha establecido un círculo pernicioso que se hace imprescindible romper mediante una nueva reformulación o reinvención de los puntos de venta y que pasa inexcusablemente por la innovación precedida, a su vez, por una mayor profesionalización tendente a acometer un nuevo perfil de establecimiento en el cual se incorporen nuevos productos o servicios que, por otra parte, mantengan la deseable armonía con la identidad tradicional del punto de venta y que tiene en el quiosco su máxima expresión desde el punto de vista del consumidor.”